La pensión de alimentos desempeña un papel crucial en la esfera legal familiar de España, siendo un aspecto fundamental en situaciones de divorcio o separación. A continuación, exploraremos detalladamente los aspectos clave relacionados con la pensión de alimentos, desde su definición y alcances hasta aspectos específicos como la inclusión de gastos extraordinarios y el tratamiento de la ropa dentro de esta pensión.

¿En qué consiste la pensión de alimentos?

La pensión de alimentos es una obligación legal establecida para asegurar el sustento de los hijos en casos de disolución matrimonial. Este componente financiero tiene como objetivo cubrir los gastos esenciales asociados con la manutención, educación, atención médica y vestimenta de los hijos menores.

 ¿Qué incluye la pensión de alimentos en España?


La pensión de alimentos en España abarca una gama extensa de aspectos fundamentales para el bienestar de los hijos. Va más allá de la mera alimentación e incluye gastos relacionados con la vivienda, educación, servicios médicos y otras necesidades básicas. Esta comprensión integral garantiza que los hijos reciban un nivel adecuado de apoyo económico para su desarrollo y bienestar general.

¿La ropa entra en la pensión de alimentos?


Sí, la ropa es un componente vital dentro de la pensión de alimentos. Esto implica no solo la provisión de ropa cotidiana sino también la consideración de prendas para ocasiones especiales, así como aquellas necesarias para enfrentar distintas estaciones del año. La inclusión de la ropa dentro de la pensión garantiza que los hijos cuenten con un vestuario adecuado y acorde a sus necesidades.

¿Qué son gastos extraordinarios?


Además de la pensión regular, existen gastos extraordinarios que pueden surgir y no están contemplados en la pensión estándar. Estos pueden comprender actividades extracurriculares, tratamientos médicos no cubiertos por la seguridad social y otros costos inusuales pero necesarios para el desarrollo y bienestar de los hijos.

Requisitos pensión de alimentos


El establecimiento de la pensión de alimentos en España se rige por requisitos específicos. Estos incluyen la capacidad financiera de los progenitores, las necesidades particulares de los hijos y otras circunstancias familiares específicas. Entender estos requisitos es esencial para quienes están involucrados en procesos legales relacionados con la pensión de alimentos. Los tribunales y abogados especializados en derecho familiar utilizan estos criterios para tomar decisiones informadas que reflejen de manera justa la capacidad financiera de los progenitores y las necesidades específicas de los hijos.

IPC pensión de alimentos en 2023


La pensión alimenticia se actualizará periódicamente. Por regla general, la actualización es anual.
El importe de la pensión de alimentos debes estar contenida dentro del convenio regulador que se realice el cual para ser exigible debe ser aprobado judicialmente el cual contendrá todas la obligaciones y derechos de los progenitores con respecto a los menores.
El criterio más utilizado es la tasa de inflación calculada para el año anterior al año en cuestión.
Según la estimación preliminar del INE de la tasa de inflación del año pasado, las pensiones alimenticias en 2023 aumentarán un 7,8%.
Si la estimación del INE es correcta, una pensión de alimentos de 100,00 euros en 2022 pasará a 107,80 euros en 2023.
Para calcular el nuevo importe de la pensión alimenticia, debe multiplicar el importe de la pensión alimenticia actual por 1,078, como en el ejemplo siguiente:
€200 x 1.078 = €215,60


¿La pensión de alimentos cuenta para el ingreso mínimo vital?

Contrario a ciertas percepciones, la pensión de alimentos no se tiene en cuenta en el cálculo del ingreso mínimo vital en España. Es crucial comprender que la pensión de alimentos y el ingreso mínimo vital son dos elementos distintos en el sistema legal español, cada uno con su propósito y criterios de evaluación.
La pensión de alimentos es una obligación financiera establecida para garantizar el bienestar y sustento de los hijos en casos de divorcio o separación. Se basa en la capacidad financiera de los progenitores y las necesidades específicas de los hijos.
Por otro lado, el ingreso mínimo vital es un mecanismo de apoyo económico establecido por el gobierno para garantizar un nivel mínimo de ingresos para aquellas personas y familias en situación de vulnerabilidad económica.

Deducción en la pensión de alimentos


En algunos casos, pueden aplicarse deducciones específicas en la pensión de alimentos. Estas deducciones pueden ser consecuencia de cambios en la situación económica o necesidades extraordinarias de los hijos.
Cambios en la Situación Económica:
Por ejemplo, si el obligado a pagar la pensión experimenta una pérdida de empleo, una disminución sustancial en los ingresos, o enfrenta situaciones de insolvencia, se pueden solicitar deducciones para ajustar la cantidad de la pensión en función de la capacidad financiera actual.
Necesidades Extraordinarias de los Hijos:
Estas necesidades pueden incluir gastos médicos excepcionales, educación especializada, o cualquier otro requerimiento que vaya más allá de las necesidades básicas cubiertas por la pensión de alimentos estándar.
Las deducciones en estos casos buscan garantizar que la pensión se ajuste a la realidad de las necesidades específicas de los hijos, permitiendo una asignación de recursos más precisa.


Medidas en la pensión de alimentos


La pensión de alimentos puede estar sujeta a medidas específicas en ciertas circunstancias. Estas medidas pueden implicar ajustes en la cantidad a pagar o la frecuencia de los pagos para adaptarse a cambios en las circunstancias económicas o necesidades cambiantes de los hijos.
La flexibilidad en este proceso garantiza que la pensión de alimentos siga siendo justa y equitativa a lo largo del tiempo, adaptándose a las dinámicas cambiantes de la vida familiar.

¿Hasta cuándo hay que pagar la pensión de alimentos?


La obligación de pagar la pensión de alimentos generalmente se extiende hasta que los hijos alcanzan la mayoría de edad. Sin embargo, en situaciones como la continuación de estudios superiores, la obligación puede extenderse hasta que el hijo alcance los 25 años. Comprender estos plazos es esencial para planificar adecuadamente la responsabilidad financiera asociada.

Pensión de alimentos según el número de hijos


El número de hijos puede influir en la cantidad total de la pensión de alimentos. En el caso de un hijo único, la pensión se calculará considerando las necesidades específicas de ese hijo. Por otro lado, cuando hay dos o más hijos, la pensión se distribuirá de manera proporcional según las necesidades individuales de cada uno.

Reclamar pensión de alimentos para hijo de 27 años


En circunstancias excepcionales, como la continuación de estudios o una discapacidad, se puede buscar la extensión de la pensión de alimentos más allá de la mayoría de edad. Este proceso requiere comprender las condiciones y requisitos legales asociados con estas situaciones particulares.

Pensión de alimentos en custodia compartida

La custodia compartida puede tener un impacto en la cantidad de la pensión de alimentos. En estos casos, se consideran los ingresos y las necesidades de ambos progenitores, garantizando una distribución equitativa de la responsabilidad financiera.

Si el hijo estudia fuera…


Cuando el hijo estudia fuera de su lugar de residencia habitual, la pensión de alimentos debe ajustarse para cubrir los gastos adicionales asociados con esta situación, como alojamiento y transporte.

Pensión de alimentos para hijos discapacitados


En el caso de hijos con discapacidad, la pensión de alimentos debe ajustarse para cubrir las necesidades específicas asociadas con la discapacidad. Es fundamental entender cómo estas necesidades pueden influir en el monto y la duración de la pensión.

Impago de pensión de alimentos por insolvencia


En situaciones de insolvencia, es posible que el progenitor obligado a pagar la pensión de alimentos no pueda cumplir con la totalidad del monto. Es esencial comprender las implicaciones legales y las medidas disponibles en estos casos.

¿Qué hacer si no te pagan la pensión de alimentos?


Si te encuentras en la situación de no recibir la pensión de alimentos que te corresponde, existen pasos y medidas legales que puedes tomar para garantizar el cumplimiento de esta obligación financiera. Desde la negociación amigable hasta la intervención judicial, es crucial conocer las opciones disponibles.

Consecuencias de no pagar pensión de alimentos


La falta de cumplimiento en el pago de la pensión de alimentos puede tener consecuencias legales significativas que afectan tanto al progenitor obligado como al bienestar de los hijos.
A continuación, se detallan algunas de las posibles consecuencias, incluyendo respuestas a preguntas comunes como «¿Qué pasa si no pago la pensión de alimentos?» y «¿Qué es el embargo por pensión de alimentos?».
Una de las consecuencias más directas del impago de la pensión de alimentos es la posibilidad de un embargo. En situaciones en las que el progenitor obligado no cumple con sus obligaciones de pago, el tribunal puede ordenar el embargo de sus bienes o cuentas bancarias para garantizar el cumplimiento de la deuda.

El impago continuo de la pensión de alimentos puede llevar a la imposición de sanciones financieras y, en casos extremos, a consecuencias penales. Estas sanciones pueden incluir multas significativas o incluso la posibilidad de prisión en casos de incumplimiento reiterado y deliberado. La imposición de sanciones busca disuadir el incumplimiento y garantizar que los hijos reciban el apoyo financiero necesario.
El impago de la pensión de alimentos puede resultar en la inclusión del progenitor moroso en listas de morosos, lo que puede afectar su historial crediticio y tener repercusiones financieras a largo plazo.
En algunos casos, el incumplimiento puede llevar a la intervención del tribunal para modificar la cantidad de la pensión de alimentos. Si el progenitor obligado experimenta cambios significativos en su situación económica, el tribunal puede ajustar la cantidad de la pensión para reflejar la nueva realidad financiera.

Es imperativo reconocer las consecuencias de no pagar la pensión de alimentos y tomar medidas adecuadas para evitar llegar a situaciones legales conflictivas. El cumplimiento de esta obligación financiera no solo es esencial para el bienestar de los hijos, sino que también evita complicaciones legales y financieras significativas para ambas partes involucradas.

¿Cómo solicitar un aumento de la pensión de alimentos?

En el ámbito del derecho de familia, la modificación de medidas de la pensión de alimentos es un tema crucial que puede afectar significativamente a las partes involucradas.
Cuando las circunstancias económicas o personales de los padres o del hijo beneficiario cambian, es esencial llevar a cabo un procedimiento de modificación de medidas para adecuar la nueva situación al quantum de la pensión alimenticia.
Es muy importante saber que en caso de que se den algunas de estas circunstancias, el obligado al pago de la pensión de alimentos no puede unilateralmente rebajar el importe establecido en sentencia ya que las resoluciones judiciales están para cumplirse y la otra parte podría instar su ejecución. Es necesario que se inicie un procedimiento judicial de modificación de medidas que acuerde la modificación de la pensión de alimentos establecida.
Las causas comunes para solicitar la modificación de la pensión de alimentos incluyen cambios en los ingresos de los padres, cambios en la custodia del hijo, enfermedades graves, o cualquier otra circunstancia que afecte la capacidad de los padres para cumplir con sus obligaciones económicas.
Establece el Art. 145 del Código Civil que cuando recaiga en dos o más personas la obligación de dar alimentos se repartirá entre ellas el pago de la pensión en cantidad proporcional a su caudal respectivo.

Después de un divorcio con hijos, con la sentencia llega la implementación de las medidas concluyentes que reglamentarán el vínculo entre padres e hijos. En el caso de atribuirse la custodia a uno de los dos progenitores exclusivamente, aquel que no obtenga la custodia tendrá que abonar mensualmente la cuantía fijada por el juez para el sustento del menor o menores en función a sus posibilidades económicas, conocida como la pensión de alimentos mínima.

Es necesario señalar que la pensión de alimentos es el requerimiento de respaldar los gastos de los hijos. Aparte de los gastos alimenticios, esta contribución económica es empleada para atender sus necesidades de ropa, vivienda, educación, al igual que los gastos extraordinarios previsibles. Para precisar la cifra exacta a pagar, el juez contemplará los gastos del menor y la capacidad económica de los progenitores.

Una circunstancia especialmente difícil para muchos padres separados o divorciados es saber cómo gestionar sus obligaciones como progenitor si se encuentran desempleados y sin fuente de ingresos. Una de las dudas más frecuentes en estas situaciones es:

He perdido mi trabajo, ¿puedo dejar de pagar la pensión?

La respuesta es no. Los progenitores tienen la obligación de cumplir con lo fijado en el convenio regulador. En consecuencia, se tiene que pagar diligentemente la cuantía establecida para la manutención de los menores. Además, bajo ningún concepto, se permite el desistimiento de abonar de modo unilateral la pensión. Esto supondría recibir una reclamación civil o, posiblemente, ser denunciado por vía penal. El pago de la pensión de alimentos continúa siendo una obligación judicial que debe ser cumplida.

El mismo escenario tiene lugar con la pensión compensatoria: mientras exista una sentencia que la determina, el excónyuge está forzado a su desembolso. La diferencia es que esta pensión, a través de la cual se compensa al excónyuge al que la separación o divorcio deja en una peor situación económica, no tiene carácter privilegiado en el momento de reclamación.

¿Y si no tengo ingresos suficientes?

En este caso, es posible requerir una modificación de la sentencia. No obstante, es una situación que tiene que producirse de forma constante en el tiempo, dado que se tiene que acreditar la disminución de capacidad económica. La pensión de alimentos no se puede dejar de pagar, por lo que cualquier circunstancias sobrevenida que lleva a su imposibilidad de pago debe llevar a solicitar en el juzgado la modificación de las medidas que acordaron la obligación.

Mediante este procedimiento, se puede solicitar la aminoración de la cantidad hasta que la situación laboral del progenitor mejore. Esta es la vía más certera de prevenir las repercusiones legales que puede suponer una denuncia por este incumplimiento del otro progenitor. Sin embargo, conseguir en la actualidad el cese del abono de la pensión es virtualmente inviable puesto que el mínimo vital se halla entorno a los 150€/mes.

Es necesario constatar que el cumplimiento de las sentencias, de cualquier forma, es obligatorio. Las cuantías no abonadas, así como las actualizaciones con arreglo a IPC, pueden ser reclamadas vía judicial mediante la interposición de la correspondiente demanda de ejecución. Por tanto, en el supuesto de no actuar acorde a lo estipulado, el otro progenitor contará con el derecho a pedir una demanda de ejecución que fuerce al progenitor no custodio a llevar a cabo los enunciados de la resolución judicial.

¿Tienes alguna duda relacionada con la pensión de alimentos? No dudes en contactar con nosotros, estaremos encantados de ayudarte: 610 774 935 / 950 034 456 o envía un correo electrónico a despacho@martinortegaygarroabogados.com. También puedes contactarnos a través de nuestra página de contacto.